Csaba Markus (nacido el 26
de enero de 1953) es un artista, pintor, escultor y editor estadounidense
nacido en Hungría. Como artista, trabaja principalmente en el campo del
grabado, con especial énfasis en grabado y serigrafía. Su trabajo incluye
también pintura al óleo, dibujo, vidrio, fotografía y escultura. La pintura de
Markus titulada "Pure Love" ha sido seleccionada como una de las 10
pinturas más sensuales del mundo por el periódico Toronto Sun.
“Crecí en un sistema
opresivo y comunista que no alentaba el logro individual. Como joven artista,
me sentí extremadamente frustrado por la oposición que encontré cada vez que me
presentaba a las diversas academias estatales de arte. En lugar de alentar y
nutrir las cualidades únicas de un artista prometedor, estos institutos sólo
deseaban controlar la creatividad de los estudiantes y forzarles a adoptar la
ideología predominante del partido. Aunque me decepcionó esta experiencia, me
di cuenta de que si no me hubiera unido a una de sus escuelas, nunca me habría
convertido en el tipo de artista que soy hoy. Lo que sí poseía, sin embargo,
era una creencia inquebrantable en mis sueños y una determinación inflexible de
que nada me iba a impedir cumplir mis metas”.
“La asfixia espiritual del
sistema comunista era evidente en los rostros de la gente que me rodeaba.
Estaban hambrientos de pasión e impedidos de perseguir sus sueños y metas. No
quería jugar el papel de suprimido y perder la oportunidad de darle forma a
algo único y relevante. No quería nada menos que transformar los tonos sombríos
de la vida de gris y llenarlos de luz y color y a su vez nutrir esa chispa de
esperanza que motiva cada aspecto del ser de una persona. A lo largo del
camino, pronto aprendí que no hay mayor fuente de fuerza que la que golpea
dentro del pecho humano”.
“Aunque era pobre, sin
acceso a una educación, y con un suministro limitado de pinceles, lienzos y
pinturas al óleo, mi determinación y obsesión por alcanzar mi meta era
inigualable. Afortunadamente, mi país tenía una larga historia antes de la
llegada de los comunistas, y las obras de la antigüedad clásica existían en
abundancia. Por lo tanto, pasé horas interminables en museos estudiando a los
viejos maestros y vagando por las muchas plazas públicas que albergaban las
grandes esculturas del pasado. De hecho, yo estaba tan empeñado en mejorar mis
talentos, que puedo recordar pasar un verano entero luchando por dominar una de
las características más difíciles del cuerpo humano, la mano. Pinté como nunca había
pintado antes, trabajando hasta el agotamiento hasta que estuve satisfecho de
haber perfeccionado las muchas sombras, ángulos y proporciones que componen la
mano humana sobre lienzo. Y no me detuve allí, observando y estudiando no sólo
las perspectivas variadas e intrincadas de un Leonardo Da Vinci, un Rembrandt y
un Rafael, sino también los rostros, los gestos y los movimientos de las
personas que encontré durante mi día a día. Pacientemente, pero intensamente,
mi arduo trabajo empezó a dar sus frutos, y con él una estética y una filosofía
de belleza y perseverancia. Esto es lo que intento inculcar en mi arte, una
creencia y una visión que, independientemente de las fuerzas negativas que a
menudo actúan contra el individuo, el espíritu humano nunca puede ser suprimido
porque mediante una dedicación inflexible es capaz de superar incluso el mayor
de los desafíos”.
Fuentes:
Nota: La propiedad intelectual de las imágenes que aparecen en este blog
corresponde a sus autores y a quienes éstos las hayan cedido. El único objetivo
de este sitio es divulgar el conocimiento de estos pintores, a los que admiro,
y que otras personas disfruten contemplando sus obras.
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